

llegaron las nieves, los frios, las heladas...
salir al sol.
sobre mi cabeza
chuzos de punta
sobre mi cabeza
chuzos de punta
Hay viajes donde uno parece disfrutar con el disfrute de los demás. Hay viajes donde uno ve por los ojos de otros, donde uno sólo mira cómo su acompañante mira...
Aprovechando el puente para quitar toda la hojarasca acumulada en la casa de mis padres (aún dolorido todo mi cuerpo) me encontré con esta grata sorpresa. Saqué el móvil para compartir gráficamente la imagen, y el bolígrafo para contarlo. Y ¡qué olor!
Siempre dije que con frecuencia, lo bello lo tenemos ante las narices. Muchas veces desde mi terraza veo cosas maravillosas, escenas verderamente hermosas. Hoy, el atardecer del otoño manchego me ha vuelto a brindar otra de ellas. La intento plasmar para compartir:
Recibir amigos es siempre una suerte. Pero además, se le suele sacar al hecho beneficios colaterales. Por ejemplo, visitas con ellos para compartir aquellos sitios que consideras maravillosos, pero que tu sólo no visitas apenas. Así, este fin de semana volví a Alcalá del Júcar, un lugar que debiera ser de obligada visita para mejorar el mundo. Excavado en maravillosas rocas, blanquito, castillo arriba y Júcar abajo... una delicia que conocen bien los anunciantes de turrón y Nescafé. Volví a vivir instantes maravillosos. En la isleta, rodeado de río por todos lados, me encontré con este pedazo de hongo pegado al tronco del pino piñonero. Y claro...
Volvía de una mañana de trabajo en Ciudad Real, cuando cerca de Tomelloso me sorprendíeron unas cuantas gotas de agua sobre el sucio cristal del coche. A lo lejos, se percibían las sombras de un tremendo aguacero y ... de repente, ¡el arco iris! La sensación fue tremeda, inmediata. Desde dentro del coche y con el móvil, saqué una fotografía al tiempo que mi mente empezó a funcionar en clave de haiku. Vino la palabra carretera a mi mente, para inmediatamente salirme:
Ni mucho menos todo lo que irá apareciendo en esta página será haiku. Ya se ha avisado. Habrá intentos, pruebas, variaciones, bromas, senryu, zappai, tercetos,etc. ; que surgen en 5-7-5 y que nada tiene que ver con el haiku; porque no todo lo que se hace en 5-7-5 es haiku. A continuación, y para "desengrasar" de lo de ayer, una serie de tercetos que a lo largo del tiempo fueron apareciendo con motivo infantil.
Bolivia es un país plagado de maravillas. Sin duda el Titicaca (con sus islas) y la Cordillera Real (al fondo, sobre el horizonte) son unas de ellas (aunque he de reconocer que hubo una cosa que aún me impactó más: Lo dejo para una próxima entrada). Aquí, aunque el haiku suele tener efecto zoom y acaba en algún detalle por lo general, la grandiosidad de la Naturaleza, me llevó a escribir también algunas cosas de vista amplia.
Tras poner los pilares del blog y hacer una declaración de intenciones, pensé no ponerlo en marcha si no lo iba a poder mantener (hacer entradas periódiacs). Bien, creo que llegó el momento. Y lo hago al hilo de lo que viví hace cierto tiempo: una Mantis en medio de la calle, estática, tanto como para poder hacerme con una lupa y poder examinarla y fotografiarla detenidamente sin que se inmutara.